lunes, abril 09, 2007

Cuadragésimo noveno - In da tiatres 2 -

Saludos, querido y teórico lector. Bienaventurado seas en este viaje de introspección y búsqueda de la felicidad. Has llegado al lugar en el que con ignominiosa sabiduría eres recompensado por tu tosquedad. Hoy, en un afable gesto, trataré de no ofender tu inteligencia con simplezas estoicas.





Para los que no’más no le agarraron la onda al párrafo anterior, quiero decir que este post no estará dedicado a mi auto engrandecimiento creado por las constantes burlas hacia tu persona.





En este post, me limitaré a hacer una crítica/relato (cómo hace mucho no hacía) a uno de los fenómenos mediáticos más grandes de nuestros tiempos: “El cine”. Así es, el cine. Ese enorme lugar al que asistes constantemente (ó, tal vez no) para ver las películas que tanto te han llamado la atención.





Por tal motivo, te presento, sin más ni más:





Cine




La promoción no es válida de lunes a viernes ni fines de semana.








M’kay. Es un día cualquiera, tus ineptos profesores se encargan de hacerte la vida difícil sólo por que lo disfrutan; algunas otras, porque no han sido satisfechas desde hace algún tiempo y toda esa tensión sexual acumulada únicamente puede ser liberada en forma de endorfinas que son creadas cada que te patean la entrepierna con infames y ridículos deberes. Sea como sea, te acaban de ownear toda la semana. Pero, conciente de tu estilo de vida, sabes (y estás muy consciente de ello), que realizarás todo el trabajo una noche antes. Por tal motivo, te dispones a relajarte…







Hay muchas formas de relajarte: Algunos van a algún bar; otros al billar, otros a bailar, a nadar, a correr, a patinar, a jugar videojuegos, a leer, algunos se van a San Juan de los Lagos caminando, etc. Pero realmente, una de las actividades que más realizan es ir al cine.







El conocido como Séptimo Arte, siempre es una opción para ir a divertirte con tus amigos, tu novi@, tu familia y patéticamente… tu solo. Ese lugar en el que todas tus fantasías son proyectadas en la pantalla mientras te cuentan una historia que esperas no olvidarás. Todo por un precio asequible.







Sin embargo, el cine es más que un lugar en donde se proyectan fotografías reales, que, por la rapidez con que se proyectan, el ojo las percibe como un hecho continuo. Es un territorio en el que todas las cosas que te enervan convergen simultáneamente. Algún teórico lector, seguramente ha de pensar que estoy exagerando con tal afirmación. Pero piénsalo un segundo… …. …. …. M’kay, ya, suficiente. El cine es un lugar que deberías odiar, pero que simplemente adoras y no puedes evitar asistir. Te llama como el Señor Oscuro al anillo.




Pero no me creas a mí, querido y teórico lector incrédulo, lee todo el post y convéncete por ti mismo:







Cada que vas a ir al cine, te encuentras con encrucijadas. Muchas, a cada momento. Veamos porque.




… Ya has decidido que irás al cine. Ahora, viene la segunda parte… y es donde comienza la tortura:







Por alguna razón, no te gusta ir al cine sólo. Aunque es un lugar en el que se supone está prohibido hablar y por lo tanto, la compañía es un ítem dispensable. Pero irónicamente, el asistir sin compañía al cine automáticamente te convierte en un perdedor. Cuándo llegas a la taquilla y pides UNA entrada, el tipo de los boletos te ve con cara de







- Put’s… el goey viene solo. ¡Qué perdedor!







Posteriormente, pasas al expendio de caramelos. Todo va normal… hasta que amablemente te piden tu orden:







- Un refresco grande y unas palomitas chicas, por favor.







PUUUUUUUTTTTTTSSSSS!!! Acabas de convertirte en uno de esos cinéfilos gordos, freaks y sin amigos (similar al tipo de los comics en Los Simpson); por el simple hecho de comprar provisiones para “una sola persona”. Ahora, los amables jóvenes que atienden te ven con ojos de lástima y algunos otros, con risa. Varios sienten tanto asco por tu persona que si pudieran hacerlo vomitarían irremediablemente sobre tus palomitas. Porque contrario a lo que puedas creer, ir al cine solo no es bien visto.





Por tal motivo, es imperioso que asistas con alguien. Aquí viene la primera encrucijada:







1.- Si vas con tu novia, seguramente verán la película que ella quiera, no importa que se trate de “Eragon” o “La risa en vacaciones reloaded”. A cambio, recibirás generosos apapachos en la sala del cine.




2.- Si vas con tus compañeros de la escuela, es algo más parejo. Todos votan para elegir una película. Si sale “VanHellsing” y tú querías “La chica de al lado” te muerdes un huevo y entras a ver VanHellsing.




3.- Si vas con una chava que te gusta, entras a ver la película que ella quiera. Tal vez ganes uno o dos abrazos y algunos puntos con ella, pero perderás mucho dinero. Frases como: ¿… Y de beber? Cobran poderoso sentido.




4.- Si vas con tus amigos, al tener gustos similares, pueden entrar a ver películas más extravagantes, como “Aqua Teen Hunger Force The Movie” o “Final Fantasy VII”.







Aunque, no podemos olvidar que siempre está el “cine extranjero”. Mayoritariamente, las películas son malas; solo los que quieren parecer muy cultos, afirman que “la película fue una obra de arte, y que no nos gustó por que no entendimos la yuxtaposición de los elementos intrínsecos de la teoría Kantiana manejada en la película”.




Aunque existen buenas películas extranjeras, la mayoría, son del tipo francés, con hechos de la vida real y más aburridas que un documental de 6 horas de las diferentes formas de decir “Catsup”. Por ejemplo, si vemos la sinopsis de una película francesa sería algo así:







- Le pupú do mató le wawá !








Película francesa que narra la trágica historia de un niño que ve como su perro es asesinado brutalmente por un tren. Aquí comienza una historia de introspección y autorrealización en la que Pier, deberá enfrentarse con su pasado para encontrar la verdadera felicidad.








WTF??? Quiero decir… WTF??? Digo… ¿Quién se llama Pier?







Mejor prosigamos con el post.







No importa cual opción escojas, el siguiente punto es escoger la hora.







Casi siempre, es en la noche. O de perdido, en la tarde, más o menos como a las 18:30. Como todo fue más o menos improvisado, algunos llegan temprano, algunos más tarde. Acaban de llegar y escogen película.







M’key… que sea… “Matadero 666”. Veamos… la hora más cercana es a las… 19:45.







No obstante, ya que escogieron la película, viene una parte que casi nunca falta:







Vendedor genérico de boletos – Matadero 666 es una película clasificación C. Me muestras las credenciales tuya y de tus acompañantes, por favor.





Por supuesto, tú y tus compañeros, como adultos responsables, sacan sus credenciales de elector. O, al menos eso sucedería si tú y tus compañeros fueran adultos responsables. Lo que en verdad pasa es que por algún motivo, desconocido para todos, X persona no ha tramitado su credencial, a otro se le olvidó, a otro se le perdió… y así sucesivamente. Sólo una o dos personas de todo el contingente de goeyes trae credencial. El vendedor de boletos se engrandece cuando le suplicas dramáticamente que te venda los boletos. Ante su negación, solo te queda maldecirlo mentalmente:







- Ojalá que se te caiga el cabello de la cabeza y te crezca en el pubis.







Pero bueno, ahora supongamos que la película que van a ver es B15. Digamos… “Epic Movie”.




Son las 18:00 y la película comienza 19:15







Más de una hora para que comience la película. Aquí llegamos a otra encrucijada:







1.- Esperamos sentados a que comience la película.




2.- Nos vamos a dar un rol y regresamos más tarde.







La paciencia es un don que los adolescentes cambian por algunos segundos de diversión, así que compran los boletos, e inmediatamente después, se van a dar un rol por el cine/plaza. Curiosean durante más o menos una hora en las tiendas deportivas, las tiendas de moda, las de mascotas, los de expendios de comida chatarra, y claro, como no, las tiendas de celulares. Más o menos después de 50 minutos de caminatas inútiles alguien observa el reloj Casio MQ-76 que es similar al mío y les recuerda que ya casi es hora de entrar al cine.







Antes de entrar, por supuesto es necesario comprar los alimentos que servirán para acompañar la función. Un refresco para cada uno y unas palomitas grandes para compartir entre dos o tres. Alguien tal vez pida también un helado, un chocolate o un hotdog.




Mientras regresan al cine pensando qué van a comprar, les asalta impertinentemente un escalofrío por la espalda y un flashazo les pasa por el cerebro:







Hoy es miércoles.







Por cierta enferma razón, TODOS los cines de México, tienen la promoción de miércoles 2x1. Esto, como puedes comprender, atrae a mucha gente. Tanta gente que tu agorafobia te patea la entrepierna con laxitud. Así, maldiciendo a todo mundo, recordando a las madres (inocentes, por cierto) de todos los asistentes del cine, te formas para comprar lo necesario para la sana diversión, conciente de que faltan míseros 8 minutos para el comienzo de la película.




Con inquieta curiosidad, te preguntas el por qué ningún otro de tus compañeros está ahí para comprar sus alimentos. La respuesta, llega en forma de imperiosa pregunta:







- Oye: Ya que andas a gatas… cómprame unas palomitas grandes y dos refrescos ¿NO?







La frase se repite unas dos veces más y al fin tienes la lista de todo lo que comprarás. Te fijas que tan lejos estás del expendedor y calculas que serán más o menos 5 minutos. Lo que no sabes, es que todos los goeyes que están delante de ti, también tienen la misión de comprar provisiones para todo su clan. Por lo que esos 5 minutos, se convierten en 15 (si te va bien).







15 minutos de observar agónicamente como no avanza la fila. De observar como tus compañeros te miran lastimeramente pensando en tu falta de audacia. 15 largos minutos pensando en que la película ya va a comenzar. Casi crees que esa tortura es tu expiación por todas las cosas malas que les has dicho a los simiescos compañeros de clase.







Al fin llegas al expendedor, amablemente le solicitas todo lo que te pidieron y luego, al final, por supuesto de manera educada le solicitas lo tuyo. La conversación, más o menos es así:







- Teh Dib - ‘ Tardes.




- Expendedor de palomitas - BUENAS tardes ¿En que puedo servirle?




- Teh Dib – Suminístreme por favor, 2 palomitas grandes, unas palomitas medianas, 4 refrescos grandes, un hotdog y un chocolate con galletas, por favor.




- Expendedor de palomitas - ¿Serían: 2 palomitas grandes, unas palomitas medianas, 4 refrescos grandes, un hotdog y un chocolate con galletas?




- Teh Dib - Efectivamente




- Expendedor de palomitas – ¿Sabe que por $5.00 puede ampliar sus palomitas por unas extragrandes?




- Teh Dib – Estoy conciente de ello; pero no, muchas gracias.




- Expendedor de palomitas – De acuerdo, salen 2 palomitas grandes, unas palomitas medianas, 4 refrescos grandes, un hotdog.




- Teh Dib – Falta el chocolate con galletas.




- Expendedor de palomitas – Aquí tiene, disculpe. Serían $215.00







Pagas, y hastiado, sales de la fila. Ahora, es momento de colocar salsa sobre las palomitas. Sabes cabalmente bien que si le pones salsa a las palomitas, siguiendo la Ley de Murphy, se te caerán encima de tu playera blanca. Pero el no ponerle salsa a las palomitas es casi un pecado y es considerado delito en 20 entidades de la unión americana y México, así que, le pones salsa hasta que puedes escuchar a las palomitas retorcerse de insufrible dolor.







Llevan cinco minutos de retraso en la película. Infantilmente, piensas que esos cinco minutos son los que tienen los trailers de las siguientes películas; piensas que van bien para ver el comienzo de la película.







Desafortunadamente para ti, la película ya comenzó. Volteas a ver a lo lejos para encontrar un lugar adecuado para sentarte… llegas con la vista hasta la última fila… llena, penúltima fila… llena… así prosigues. Todas las malditas filas están llenas. Excepto, claro, las primeras 2. No quedándote de otra te sientas en la segunda fila.







La película tiene complejas escenas de acción en las que la cámara no deja de moverse. Tú, al estar tan condenadamente cerca, tratas de contener el vómito que te aqueja puesto que tales escenas te marean como juego de Six Flags. Cuando más o menos te acostumbras, le pones atención a la historia. No está tan mal… y de pronto:







- Jajajajajajajajajaja!!!







Un montón de niñas comienza a reírse fuertemente, como si estuvieran en una sesión de onanismo y cosquillas al mismo tiempo. Inocentemente, tratan de “callar” sus risas, bajando el volumen de éstas. Esto, es aun más molesto. Crees que puedes soportarlo, pero entonces:







- Jajajajajajajajaja!!!







PUTS!!!! No mamar, en serio, no mamar. Del coraje ya no puedes ni conjugar adecuadamente un verbo. Cada que se ríen, sientes que te patean las bolas y quisieras pararte, darle una cachetada y decirle:







- M’kay, you bitch! That’s enough of your shit.







Al fin, las jovencitas se callan. Luego, llega algo más castroso que las chavitas riéndose. Va más o menos así:







- Rrrrriiiiiiinnnnnnnnnnnngggggggggggggg!!!




- Rrrrriiiiiiinnnnnnnnnnnngggggggggggggg!!!








PUTTSSSS!!! Ahora suena un celular. No jodas!!! Y esto es SIEMPRE





Aunque al principio de la película se recuerda que apaguen o pongan en modo silencio los celulares, algunas personas - como diría el autor - con una mano en el bolsillo y un dedo en el culo, hacen caso omiso de tal recomendación.







Y luego, en lugar de tratar de reparar su error, apagando el celular, las acciones siguen más o menos así:





- Sí… si, soy yo.




- … …




- No goey, ahorita no puedo.




-




- Estoy en el cine




-




- Epic Movie




- … …




- Pu’s ta’ más o menos.




- … …




- No goey.




- … … … ….




- Sale, entonces luego te hablo.




- … … …




- Simón, sale, luego nos vemos.







Finalmente, dependiendo de la película que hayas ido a ver, puedes salir decepcionado, aburrido, hastiado, alegre, emocionado indiferente o una combinación de dos o más de los adjetivos anteriores.




Y claro, como no, con una enorme mancha de salsa en la playera.







Y aunque este escrito parezca que tuvo que haberlo redactado una mano febril en una noche de insomnio, les aseguro que está basado en una historia real.







Así, después, de haber leído todo este post, querido y teórico lector, hagamos un recuento de las cosas que te patean la bragadura al ir al cine:







1. - No puedes ir solo.




2. - Si no querías ver esa película, te muerdes un huevo y la ves.




3.- Pier.




4.- Que te pidan tu credencial de elector por que no luces lo suficientemente mayor.




5.- La espera




6.- La gente




7.- Los miércoles




8.- Los expendedores de palomitas




9.- No ver el principio de la película.




10.- Sentarte hasta adelante




11.- Los ruidosos mozalbetes




12.- El goey que contesta su celular a media función.




13.- Salsa en tu ropa blanca.




14.- Que volverás a ir, aun sabiendo que muchas de las cosas que odias están ahí.





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Cambiando de tema, deseo comentar que hace poco tuve la oportunidad de asistir a los World Cyber Games en el tour que el Latingamer realizó. Esperaba mucho de tal evento. Los primeros lugares de cada juego viajarían a la ciudad (o estado, como le dicen algunos) de Monterrey. La mayoría de los juegos que había, eran para XBox 360 (consola que, por cierto, me caga). No obstante, había dos juegos para PC que me llamaron poderosamente la atención: Starcraft: Broodwar y Warcraft III: Frozen Throne. En ambos juegos me considero suficientemente bueno. Digo, tal vez no sea el mejor de estado, pero ciertamente puedo ofrecer una reta decente. Como sea, se suponía que todo comenzaba a las 11:00. Como atenta persona que soy, llegué a la hora adecuada y apenas estaban ensamblando algunas cosas. Un goey que iba conmigo se acercó a preguntarle si era necesario algún requisito para inscribirnos; y, como observamos que todavía faltaba mucho por ensamblar, para ofrecernos como voluntarios y ganar una de esas playeras que se ven super cool.







La entrevista fue más o menos así:







- Buenos días, disculpe, ¿es necesario algo para inscribirnos?




- Hasta dentro de una media hora más.




- Sí, pero ¿es necesario algo para inscribirnos, dinero, envases de yogurt, algo?




- En una media hora más comenzamos.




- Bueno… este, ¿necesita ayuda en algo?




- En media hora comenzamos.







Incrédulos, fuimos a dar un rol por la plaza en la que se llevaba a cabo el evento. Digo, después de la soez e ignominiosa respuesta que obtuvimos, no suplicaríamos.







Media hora después, regresamos al lugar. Casi no habían avanzado nada en la tarea que realizaban. Unos minutos después, unos goeyes (debo admitir, mejor vestidos que nosotros), le cuestionaron básicamente lo mismo, pero la respuesta fue completamente diferente. Fue más o menos así:







- Buenos días, disculpe, ¿es necesario algo para inscribirnos?




- Buenos días (extiende su enorme mano sudorosa en forma de saludo). No muchachos, la inscripción es totalmente gratis. Solamente permítanos terminar de ensamblar esto y comenzamos. (Sonríe)




- ¿Podemos ayudar en algo?




- Muchas gracias, sí, si no les molesta, ¿podrían ayudarnos a terminar de ensamblar esto?







Convencidos del racismo y discriminación, decidimos observar atentamente como trabajaban bajo el ardiente sol, agradecidos de que no fuéramos nosotros. Algunos minutos después, el sujeto llegó y les regaló una de esas playeras que les mencioné. ¡Perra! Grité para mis adentros.







Habían pasado 45 minutos desde que llegué y de la nada, se recibió la orden de formarnos para comenzar con las inscripciones. Rápidamente, muchos geeks nos fuimos ordenadamente formando. A los cinco minutos de estar formados, y sin que nadie se hubiera inscrito aún, uno de los tres generadores de 7500 Watts que utilizaban para dar energía a todas las consolas, televisiones, PC’s, etc. falló. Durante una media hora trataron de arreglar el desperfecto. Mientras tanto, los simpáticos presentadores de la Plaza de la Tecnología, comenzaron a “animar” el ambiente, con bromas y música techno. Utilizando sarcasmo y toneladas de indiferencia de parte de casi todos los presentes, afortunadamente se callaron, después de media hora de agonizante tortura.







El tiempo pasaba y no lograban arreglar el desgraciado generador. Por tal motivo, solicitaron permiso al centro comercial que patrocinaba el evento para utilizar un contacto común y corriente. Media hora después, recibieron respuesta afirmativa y comenzaron con las maniobras.







Después de estar 90 minutos formado, al fin comenzaron las inscripciones. Había dos sujetos. Un goey y una chava ciertamente sexi. Aunque, tan sexi como lenta. Hubieran visto el problema cuando me preguntó mi nick:







- ¿Tienes algún nick, apodo, algo?




- Sí, es Teh Dib.




- Me lo deletreas por favor – dijo en tono imperioso –




- T - E - H – espacio – D – I – B




- T – H – E – espacio – D – I – B




- No, T- E – H




- Es THE ¿no? Se escribe T – H – E




- Efectivamente, pero mi nick es T – E – H




- Ah bueno







Al terminar de inscribirnos, se nos cuestionó acerca del juego al que entraríamos. Al ver que había no mucha competencia en Starcraft, decidí mejor entrar a Warcraft III. Fue algo gracioso:







- ¿A que juego vas?




- Warcraft III




- Comenzamos con Starcraft







Después de patearme con esa respuesta, no me quedó otra más que esperar a que terminara el torneo de Starcraft para comenzar con Warcraft.







Para los que no conozcan el juego, Starcraft tiene la posibilidad de enfrentar a 8 jugadores al mismo tiempo. Sin embargo, en esta competencia, solamente tenían cuatro computadoras. Y las retas eran de uno contra uno. Por tal razón, el torneo eliminatoria de Starcraft duró HORAS. Horribles y calurosas horas que me la pasé sin jugar, sentado en un escalón, aburrido y observando cómo unos goeyes jugaban magic.







Al fin terminó el torneo de Starcraft.. Seguía mi juego. Estaba tan decidido a al menos, avanzar a la ronda del domingo, que me pasé al menos hora y media platicando con algunos otros expertos del juego (amigos míos) algunas estrategias avanzadas del juego.







Al ver que no comenzaba, fuimos a preguntar qué sucedía. La respuesta fue clara:







- No nos está jalando la red.







PUTSS!!!




Muriendo de inanición, fui a comprar algunas botanas para aguantar. Los sabritones gigantes y las toreadas Barcel no se hicieron esperar. Las donas Bimbo hicieron de las suyas. 4 litros de jugo satisficieron la sed de 5 ávidas personas.







Observo mi celular a las 15:47. Un mensaje había llegado y no me había enterado. Era un amable saludo de parte de una amiga que me avisaba atentamente que a las 15:00 comenzaba el maratón de Héroes en Universal Channel. Turbado, me maldije por no estar en casa viendo dicho programa. En cambio, estaba comiendo chatarra en un lugar caluroso, sin haber tocado un juego en todo el día. A las 17:00, hartos, nos acercamos a cuestionar que diablos sucedía. La respuesta llegó otra vez en forma de un ataque tipo “nutcracker”.







- Es que no tenemos un parche necesario y se fueron a descargarlo.







No mamar… en serio… no mamar.







Ya eran las 18:00. Todavía no comenzaba nada. Hastiado hasta el esfínter, decidí irme a casa. Simplemente me fui. Cuando llevaba 5 minutos caminando, recordé que había sido cordialmente invitado a una pequeña reunión a las 17:00. Con chabacana alegría, negué mi presencia en dicha reunión según yo porque iba a estar jugando en los WCG.







A las 19:00 llegué a mi casa, agotado, harto, fastidiado, aburrido y en lugar de traer de premio un boleto a Monterrey, traje conmigo un libro imaginario de cómo quererme mucho… con la mano, editado en el departamento de pelaciones.







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Por último, debo decir:







Undertaker… New World heavyweight Champion.




Mr. Kennedy... Mr. Money in the Bank... bank.







Como siempre... Wrestlemania RULES!!!







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Un agradecimiento a Juan por pasarme el Soundtrack de SouthPark, Bigger, Longer & Uncut.




Si no han visto la película, no tienen una idea de lo que se pierden… el mejor musical que haya visto en mi vida. Infinitamente mejor que Chicago o El Fantasma de la Ópera. Mucho mejor que Moulin Rouge. No he visto Cats, pero estoy seguro de que también es mejor.








Por cierto... como estoy casi seguro de que tu vocabulario es casi tan grande como tu I.Q. modifico la convocatoria para el post de potabilidad. Ahora, simplemente necesito que me envíen fotografías y el nombre de la mujer que envíen. No salgan con que me envían 100 fotos que encontraron en lamaslinda.com y no saben quienes son. Necesito los nombres.











EDIT:




OMFG!!! LUCY PINDER TOPLESS




HOY DEBE SER UN HERMOSO DÍA PARA LA CIENCIA




JUSTAMENTE CUANDO CREÍA QUE NO PODÍA SER MÁS FELIZ.








* Mas información, busquen la revista "Nuts" Abril 2007 o envíen un e-mail.




EDIT 2:

Para todos aquellos que no me creían:



Puedes hacer tu medición en el siguiente link:

http://www.iqtest.dk/main.swf



Bytes!

viernes, marzo 23, 2007

Cuadragésimo octavo - In tha tiatres -

Saludos querido y teórico lector.

Hoy estoy moderadamente feliz, puesto que he realizado satisfactoriamente un proyecto que me mantenía ocupado, razón por la cual no había actualizado este blog que con chabacana alegría e imperiosa necesidad devoras ávido de conocimiento.

Es interesante. Hace algún tiempo no actualizaba el blog por que no tenía temas para criticar. Ahora, tengo varios; pero por alguna razón, las palabras no salen como me gustaría que lo hicieran. Aunque el post de potabilidad va adquiriendo forma (y no precisamente gracias a ti, ya que no he recibido ningún correo) y los tópicos a criticar me patean la espinilla para que lo haga, he decidido simplemente regresar a uno de los posts que hacía mucho no escribía: La crítica de películas.

En estos últimos días, he tenido la oportunidad de ver varias películas que voy a reseñar, para que tú, mi querido y teórico lector con deseos de empaparse del séptimo arte, no falle al escoger la película que te mantendrá ocupado por aproximadamente 90 minutos.

Comenzamos:

Chicas malas


Dirige: Fernando Sariñana

Actúan: Martha Higareda, María Aura, Ximena Sariñana, Alejandra Adama y Camila Sodi

M’kay. ¿Que puedo decir de esta película? Es interesante ver como el director trata de mostrar un toque de humor similar a “Matando Cabos”. Patéticamente, no lo logra. La historia nos habla del clásico hombre de negocios que trata de postularse a un cargo público, pero que la deplorable conducta de su hija es un constante impedimento para tal efecto. Por esta razón, la envía a una “Escuela para señoritas”. Aquí comienza toda la aventura en la que la “señorita” conoce el amor, la amistad, la decepción, etc.

La película, en sí, a mi gusto, es mala. Los diálogos son predecibles, sosos, y tratan de “asemejar el lenguaje juvenil de hoy en día”; hasta parece que el guionista es un anciano que trataba de imaginar como se habla en estos días. Las actuaciones son pésimas, pero pésimas. Hay actrices porno que actúan mejor que muchas de la película. La historia detrás cada personaje deja de tener importancia a la mitad de la película.

En fin… aunque se agradece el desnudo de Martha Higareda; no justifica para nada el costo de un boleto del cine.

Tal vez las mujeres disfruten más la película. Yo en lo personal, no la recomiendo.

Lo medio bueno: El desnudo de Martha Higareda.

Lo malo: Las actuaciones, los diálogos, la historia.

Lo feo: La vi en el cine.

Calificación: 2 nachos, 2 palomitas.

Una película épica (Epic Movie)


Dirige: Jason Friedberg, Aaron Seltzer

Actúan: Kal Penn, Adam Campbell, Jennifer Coolidge, Jayma Mays, Faune A. Chambers, Crispin Glover, Tony Cox, Héctor Jiménez.

De los creadores de Scary Movie nos llega este film, que siguiendo con la tradición de los directores, parodia muchas películas de manera ridícula. Entre las cintas que parodian están:

Charile y la fábrica de Chocolate, Piratas del Caribe, Las crónicas de Narnia, StarWars, Xmen, Clic, Nacho Libre, Serpientes a bordo, Tokio Drift, Superman, entre otras con menos apariciones.

La historia, como siempre, nada convencional y solo está ahí para justificar todas las parodias. Ciertamente, es una película entretenida; tiene diálogos divertidos (si entienden inglés, la van a disfrutar mucho más). Tiene parodias excepcionalmente buenas como la de Xmen y la de Piratas del Caribe. Es una buena película para ir a ver cuando no tienen nada mejor que hacer. Sin embargo, al ser B15, siento que se limitaron un poco en las bromas. Tiene muchas escenas musicales, algunas muy buenas, como por ejemplo la del principio con la canción de Fergalicious; otros muy aburridos, por ejemplo algunos de HipHop en la casa del Fauno.

De las actuaciones, ni hablar. No eran necesarias buenas actuaciones para hacer una buena película.

Yo recomiendo que mejor la renten en DVD cuando salga en lugar de ir a verla al cine.

Lo bueno: Jack Swallows, Fergalicious, Magneto, la parodia de Punk’D.

Lo malo. El final. Los musicales de HipHop.

Lo feo: La mamá de Stifler.

Calificación: 3 nachos, 3 palomitas.

The Fast & The Furious Tokio Drift.

Dirige: Justin Lin

Actúan: Lucas Black, Damien Marzette, Trula M. Marcus,, Zachery Ty Bryan Brandon Brendel , Daniel Booko , David V. Thomas

Un amigo y yo rentamos está movie esperando encontrar a lindas y sexies asiáticas pululando en todas las escenas… nada más lejos de la realidad. Los protagonistas (los buenos) son goeyes que ni siquiera son orientales. Un apestoso americano y una “notanpior” hija de Australianos (según la película), un negro y un asiático que se creía muy cool. Los malos si son orientales. Un goey con la cara plana y otro perdedor que creía que al pintarse el cabello de amarillo se vería más Yakuza.

La historia… un goey quesque sabe mucho de carros y de carreras es arrestado luego de casi matarse y en el proceso destruir un automóvil de 80 mil dólares. Para evitar que vaya a la cárcel, su madre debe prostituirse (esto lo inventé yo, pero casi estoy seguro de que así sucedió) y enviar al gañanesco sujeto a Tokio a vivir con su degenerado padre. Aquí conoce a un negro que lo lleva al bajo mundo de las carreras “Drift” y al participar arruina un automóvil que debe pagar haciendo “trabajitos”.

La historia se desarrolla pésimamente.

Al final el goey le propone a un Yakuza una carrera Drift; pues según él, es la única manera de arreglar todo honorablemente.

Los diálogos también están muy choteados y hasta aburren.

Las orientales sexies que esperabas salieran en la película, son opacadas por la desabrida Australiana y los “ModCars”.

Lo patético de esto, es que aunque se supone todo se desarrolla en Tokio, las escenas fueron tomadas en E.U.A.

Los extras… nada especial, algunas escenas borradas (que por cierto, se agradece que fueran borradas), el “making of”, etc. En cuanto a los idiomas, el DVD región 4 viene con 4 lenguajes: Inglés 5.1 y DTS, Español 5.1 y Francés 5.1. Por supuesto recomiendo el Inglés 5.1 (aunque si tienes soporte DTS imagino que será lo mejor), aunque el doblaje al español está muy bien. No obstante, el doblaje al francés está ASQUEROSO.

Lo bueno: Una o dos orientales sexies.

Lo malo: Los diálogos, los protagonistas y las locaciones.

Lo feo: Las orientales que no son sexies.

Factor WTF: Vin Diesel sale al final de la película.

Calificación: 3 nachos.

Jackass 2

Dirige: Jeff Tremaine

Actúan: Johnny Knoxville, Steve-O, WeeMan, PartyBoy, Bam Margera.

OMFG!!!

Eso fue lo que dije cuando ví la primera película de Jackass hace ya algún tiempo. Así, al encontrar Jackass 2 en mi videoclub dije:

OMFG!!! x 2

La renté y la puse en mi DVD. Fueron 90 minutos de risas incontrolables, gritos de dolor y arcadas de asco. Llevan al límite la idiotez extrema y realizan actos que cualquier persona cuerda rehusaría. Eventos tan increíblemente dolorosos como la carnada humana, hasta los más repulsivos como la máscara de gases son realizados sin pudor alguno por estos goeyes. Toda clase de proezas enfermas son mostradas sin censura.

2 veces más divertida que la primera parte. 4 veces más asquerosa que cualquier otra película que hayas visto. Jackass 2 es una película obligada para todos aquellos que no se incomoden por ver cosas tan arriesgadas como usar un sube y baja para torear a un buey siberiano; cosas tan entretenidas como el Weeman siendo jalado por un obeso hacia el mar; cosas tan vomitivamente repulsivas como la ingesta de excremento de caballo; o cosas tan depravadas como la muestra indiscriminada de juguetes sexuales.

Si sientes que ninguna de estas cosas es demasiado para ti, entonces ve y renta Jackass 2. No te arrepentirás. ¡Ah! También aparecen por ahí personajes famosos como Dave Mirra y Tony Hawk.

Por cierto, los EXTRAS están brutales. Más de 30 minutos de escenas borradas, todas completamente entretenidas.

Lo bueno: WeeMan, los toros, El tío Phil, que tal vez haya una tercera parte.

Lo malo: Es ASQUEROSA. Y para que yo diga que es asquerosa, en verdad es asquerosa, no le quita lo entretenido, pero es asquerosa.

Lo feo: WeeMan desnudo.

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Por cierto, estoy moderadamente feliz porque próximamente, saldrá en el cine la película de Aqua Teen Hunger Force… no tienen idea del placer orgásmico que me causó saber tal noticia. Hacía mucho que no esperaba una película como lo hago con esta. Si desean ver el trailer, está AQUÍ.

Y antes de que se me olvide, para cierta maestra castrosa, de cierta materia castrosa, sólo tengo algo que decir:

Bytes!

sábado, marzo 03, 2007

Cuadragésimo séptimo - Recuperación -

Saludos cordiales, mi muy, muy, muy querida y teórica lectora y… ¿Wassssaaaaaa Teórico lector?

Tal vez te preguntes, querido y teórico lector qué ha sido de “Teh Dib” todo este largo mes (¡ja! ¡Que irónico!). Incluso, tu mente hiperactiva (¡doble ja!) ha de imaginar horribles escenarios, como por ejemplo, que Teh Dib fue asaltado de nuevo con un desenlace desastroso.

Consiente de tus preocupaciones, he decidido dejar mis actividades cotidianas, para venir a derramar esperanza a tu solitario corazón; aunque tengo tarea hasta el esfínter. Pero, no te intranquilices querido y teórico lector, puesto que ya estoy aquí, listo para ensalzar tu vida con un toque de sarcástico humor negro que, cómo diría beto (de http://soybeto.blogspot.com) también puede contener trazas de soya.

Estoy conciente de que muchos de mis queridos y teóricos lectores desean un post de “potabilidad”. Sin embargo, creo que me confunden con alguien a quien le importa; puesto que ese post no saldrá hasta que esté listo, hasta que lo lea y me diga:

– Goey… ¡no mames! ¡Que buen post!

No saldrá hasta que consiga definir la potabilidad en términos claros, concisos y que sean fácilmente recordables. Quiero que mis queridos y teóricos lectores como tú, digan:

– Goey… ¡no mames! ¡Que buen post!

Deseo con incontenible, indubitable, imperiosa, inconsolable, inquisidora, indomable, ingeniosa e increíble necesidad que veas cuantas palabras que comienzan con “i” acabo de poner. Aunque, también deseo que sea un buen post.

Por tal razón, el post de potabilidad, tomará un poco de mucho tiempo.

Así, para aumentar mi cuenta de post en el blog, esta vez voy a poner lo que siguió del asalto.

Sin más ni más, te presento, querido y teórico lector:


Secuelas
Terreurs d'enfants
Les tristes murmures
Si loin des murs



M’key. Primero, quiero agradecer a todas las personas que preguntaron si me encontraba en buen estado. Quiero agradecer a todas esas personas que desinteresada y amablemente me preguntaron si me encontraba bien, puesto que eso demuestra que a alguien más, además de mí, le preocupo.
También, quiero agradecer a todas las personas que vulgar, interesada, soez y morbosamente me preguntaron sobre los hechos del suceso; puesto que me permitieron ofenderlos con sutil sarcasmo que hacía tiempo no practicaba.

Por supuesto, quiero enviar un agradecimiento a todos aquellos que se mordieron un huevo para no preguntarme nada y limitarse a leer el post anterior.


Comenzando con el post… ¿Cuáles son las secuelas del asalto?

Bueno… primero que nada, me encuentro un poquito muy incomunicado. También, me quedé sin música de la WWE que ambientaba casi todas las situaciones en las que me hallaba. Cierto Pointer se quedó sin estéreo. Nos quedamos sin las medidas del robot que amablemente nos obligaron a evaluar. Me quedé sin cámara fotográfica y de video. Las épicas y memorables luchas emuladas, en las que se realizaban “tombstone piledrivers” “FUs” “Batista’s Bombs” y demás, pasarán a ser entretenidos momentos para los desgraciados que tomaron mi celular.
Los orcos deberán inventar una palabra para ellos. Convertirlos en eunucos es algo demasiado bueno para ellos. Confío en que algún día pasarán a chingar a su madre adentro de un bote para que suene y en abonos para que les dure más.

Para ellos, sólo tengo una cosa que decirles:

J’ai comme envie de tourner le gaz, comme envie d’me faire sauter le plombs, comme envie de crever ton chat, comme envie d’accident d’voiture.

Pero bueno, pasemos a cosas no materiales.

Los ruidos fuertes y sorpresivos me alteran. Soy como uno de esos veteranos de Vietnam que cuando escuchan un ruido fuerte piensan que los están bombardeando.

Los primeros días, me encontraba en un tenue estado de esquizofrenia alucinatoria avanzada con ira narcisita involuntaria. No podía dejar de pensar en las posibles situaciones y desenlaces que hubieran tenido lugar de haber reaccionado de otra forma. Cada vez que imaginaba una situación, me pateaba la entrepierna el no saber que hubiera pasado. Después, me di cuenta de que el hubiera no existe, sino que...: hubo existido.

Algunos días duró este periodo. Pero, también fue acumulándose un poco de paranoia, que hasta el momento, sigue. Ya no camino tranquilo por la calle. Ahora, no importa donde me encuentre, observo atentamente hacia todos lados, reviso minuciosamente actividad sospechosa y lo peor es que la encuentro:


Si una niña se encuentra caminando por el otro lado de la calle e intempestivamente cambia de lado, puesto que le da el sol, mi enorme cerebro comienza a dilucidar de extrañas formas tal comportamiento. Preguntas como: ¿Y si es un señuelo? ¿Y si viene armada? ¿Y si es experta en robos? ¿La mujer maravilla es la novia de superman? Llegan a mi mente y trato de prepararme para cualquier cosa.

Intento parecer lo más alto y mamado posible (cosa que casi estoy seguro, no logro) y la infantil y despreocupada niña pasa como si nada a mi lado y me deja con un sentimiento de:

- No mames… es una niña, no es un goey de 1.85m con jersey azul que te pide para las caguamas.

Las maquinales personas que en el centro se acercan a pedirme la hora, son vistas con recelo y expectación. Imagino brutales golpizas entre el mundo y yo.

Mis padres ahora se la pasan preguntándome:

- ¿Cómo te fue hijo?

Juguetonamente les contesto:

- Bien… todavía no me asaltan. Pero aun es temprano.

A los amables vagos y educados holgazanes que suelo encontrarme en las Arcadias (A.K.A. maquinitas) ahora no los veo como los alegres y desinteresados individuos que pasarán a ser pateados por mí en algún juego de peleas. Ahora los veo como los alegres y desinteresados individuos que pasarán a ser pateados por mí en algún juego de peleas y que luego, en venganza, me asaltarán con lujo de brutalidad, en toda la bestialidad que la palabra permite.

Aunque toda esa paranoia es intermitente: Desaparece cuando me desmayo.

De hecho, creo que sufro de una curiosa enfermedad que los psiquiatras llaman: “secatomifobia” (miedo de que una persona llamada Jacinto tome sin permiso mi secadora de pelo); pero creo que lo que más me afecta es mi “asaltoencallejónoscurofobia” (miedo de ser asaltado en un callejón oscuro cuando te diriges a la biblioteca).

Renté muchas películas de Jet Li (ya que las de Jackie Chan me sirvieron para dos cosas: para nada y pa’ pura chingada) y aunque ciertamente se ve cool como el goey le rompe los brazos y las piernas a sus rivales, dudo poder realizar las acrobacias que el goey hace.

Ahora lo único que me anima a seguir viviendo, son todos los juegos de pelea que tengo, que me mantendrán ocupado al menos unas 565 horas (según cálculos estimados), el video de Koda Kumi “Cute Honey”, las generosas porciones de helado del Waldo’s, las 250 fotos de alta definición de Lucy Pinder y la extraña tendencia de reconvertirme progresivamente en el egoísta adicto al trabajo que siempre fui.

Al menos, cuando me recupere podré gritar:

Achieve Unlocked!!!

Nos vemos.

P.D. Por cierto, para que el thread de potabilidad esté listo, hago la siguiente:


Convocatoria



Teh Dib, la levedad del ser – El Dib – y similares:

Convocan:

A todos los teóricos lectores de este blog, que es de todos, pero que siendo más específicos es de Teh Dib, a participar en el concurso:



Manda tu post de potabilidad a Teh Dib.


Bases:

Podrán participar todos los lectores de este blog que consideren tienen una redacción suficientemente buena como para juntar 5 palabras de manera gramaticalmente correcta (o sea, el Arqui ya está fuera).

Los participantes deberán escribir un post, en inglés o español, si lo desean con una o dos frases en algún idioma raro (léase francés, ruso, alemán, japonés o latín) usando la mayor cantidad de perífrasis posibles, con un marcado humor negro (o al menos, gris) en el que describan claramente qué es la potabilidad, sus diferentes grados y clasificaciones y muchos ejemplos pictóricos de cada una de las mujeres que representan a cada categoría.

Cada post deberá incluir al menos 2 imágenes (no pornográficas o luego me cierran el changarro) de cada mujer que mencionen en el post, link hacia su PÁGINA OFICIAL o al menos, al thread de wikipedia de la mujer mencionada.

Todos los personajes mencionados en el post deben ser mujeres certificadas ante un médico legista, vivas a la fecha de envío del post y ser potables. Cualquier intento de envío con personajes que no cumplan tales características (o sea, por ejemplo, que quieran mandar hombres) será castigado severamente y el culpable será expuesto en sucesivas entradas en el blog.

Los post deberán ser enviados a la siguiente dirección de correo:

Dib@amen-amen.net

En formato de Word, o de Writer, no PDF. Los archivos que envíen a otra dirección o sean pasados por memoria USB no contarán.

Todos los post pueden ser modificados a gusto de Teh Dib.

Premios:

Los post elegidos como ganadores serán utilizados como base en mi post de la potabilidad. También se mencionarán agradecimientos a todos los participantes y a los vencedores se les premiará con la oportunidad de escribir un post en el blog, completamente incensurable, sin editar, del tema que ellos deseen y con duración como primer post de 3 semanas.

Fallo del jurado.

El jurado estará compuesto por Teh Dib y él no comete fallos.


Todos los efectos no previstos por Teh Dib no existen y no se tomarán en cuenta para nada.

Por cierto, para los que no saben qué es potabilidad; me permitiré definirlo:


Potabilidad es una figura retórica que que se define a si misma por el grado de "sabrosura" que tienen las mujeres.


P.D 2.- Muchas personas me han preguntado que significa “Teh” la respuesta según UrbanDictionary es:

1.- Orginally started off as a typo for "the", but recently has changed a bit in meaning. "Teh" still means "the", however, it is mostly used in the same manner that spanish speaking people use the word "El".

2.-Has the ability to turn nearly any word into a noun.

3.- Either a typo of the word "The" or a way to show extra emphasis onto the next word.

Bytes!

viernes, febrero 16, 2007

Cuadragésimo sexto - Delito

Saludos mi querido y teórico lector. Escribo estas líneas, que, como siempre, lees ávido de conocimiento y sabiduría general, del que sin duda es la persona más culta que conoces. O sea, yo.

Escribo molesto, muy molesto y muy frustrado. Pero no es una molestia común, creada por no tener mi cuenta de correo NO genérica o por no tener los DVD’s de la película de Daria.

Es curioso. Ya tenía preparada una entrada para hoy; sin embargo, ese post tendrá que esperar. Por situaciones de último momento, voy a cambiar esa entrada que ya tenía pensada, analizada, corregida y guardada, por una que estoy improvisando en este instante. Por tal motivo, espero que comprendas si falto a las finas pero firmes líneas prosódicas que mereces.

Ahora, voy a relatarte el suceso que hizo que cambiara intempestivamente mi decisión de posponer la entrada.
A continuación te presento mi querido y teórico lector:

ASALTO
Ó para qué me sirvieron las películas de Jackie Chan



Todo lo relatado aquí es real. Los nombres de los implicados no se ponen por que no los conozco.

Según wikipedia, un robo es un delito contra el patrimonio consistente en el apoderamiento de bienes ajenos, con intención de lucrarse, empleando para ello fuerza en las cosas o bien violencia o intimidación en las personas. Son precisamente estas dos modalidades de ejecución de la conducta las que la diferencia del hurto, que exije únicamente el acto de apoderamiento.

En un día como hoy, pero más parecido a ayer sucedieron los siguientes sucesos:

Habiendo cobrado mi reconocimiento académico monetario (A.K.A. beca), estaba moderadamente feliz, mucho más que hacía ya mucho tiempo. Separé la beca en cantidades suficientes para adquirir mis deseos más superfluos y salí a la calle. No llevaba muchas cosas, pero sí algunas de considerable valor monetario.

Entonces, cerca de las 19:00 horas, más/menos 10 minutos, llegué a mi casa. Sabiendo que un examen se acercaba pronto, tomé una responsable decisión y decidí dirigirme a la biblioteca del H. ITSLP para procurarme un libro que me permitiría adquirir aún más conocimiento del que tengo. Antes, tenía que realizar algunas actividades. Una de ellas, - la que más me urgía – era la de cargar mi querido teléfono celular, puesto que minutos antes me había avisado que le quedaba menos del 4% de batería. Hecho esto, entré al baño, miré televisión y emané barra.

Algunos minutos después, decidí que era hora de ir por el mencionado libro. Recogí la barra que emané, me mojé el cabello y miré el celular. Batería 69%. Aún no estaba cargada, pero era suficiente para poder ir al Tecnológico, buscar el libro, regresar y demás. No quería llevármelo, pero la necesidad de estar comunicado era imperiosa. De esta manera, a las 19:30 horas, más/menos 5 minutos, salí de mi casa.

Recorrí algunas calles de la laberíntica colonia en la que vivo. A poco más de la distancia de la mitad del camino entre el Tecnológico y mi casa, llegué a una amplia calle en la que observé a varios niños jugando fútbol y a dos adolescentes sentados en la calle, casi junto a ellos. Sin darle mayor importancia al asunto (en mi colonia los únicos adolescentes que no jugamos fútbol somos mi hermano y yo), seguí mi camino. Justo al dar vuelta en un callejón, uno de los adolescentes se levantó. Aceleró su caminar y cuando yo llevaba poco menos de la mitad del callejón me gritó:

- Saca para unas “Guamas” mí.

Conocedor de que es mejor cooperar ante una solicitud de tan amable procedencia, traté de recordar si tenía alguna moneda de valor suficientemente grande para satisfacer su sed de cebada, pero no suficiente para merecer valer un billete. (O sea, entre 5 y 15 pesos querido y teórico lector despistado). No obstante, mi capital se reducía a unos miserables $2.00 en monedas de $0.20 y un billete de $200.00. Por tal motivo, tuve que contestar con algo no muy inteligente:

- No traigo, chavo.

El avispado pero desorientado sujeto, dotado de lo que yo imagino es experiencia, notó que mentía, por lo que rápidamente respondió en un tono más elevado:

- Sí trais.

Al decir esto, sabía lo que se avecinaba. Ni siquiera me importó el uso del español tal malo que le dio al verbo traer.

- En serio, no traigo.

Todo esto sucedió mientras seguía avanzando por el callejón. Algunos pasos después de la mitad del callejón, el individuo corrió rápidamente, por lo que pude deducir que no estaba ebrio. Velozmente, se puso frente a mí e impidiendo mi avance entonces me dijo:

- Entonces saca lo que traigas

Al estar frente a mí, pude observar sus rasgos físicos. Era delgado, muy delgado, alto, inclusive más alto que yo. Tenía el cabello largo y peinado hacia atrás.

- Sólo traigo esto

Al decir esto, saque rápidamente las monedas de veinte centavos y se las mostré.

- ¿Qué mas trais?

No podía decirle que un billete de doscientos. Solo me quedaba una alternativa. Golpear, patear y correr como una niña asustada hacia un taller mecánico muy cerca del callejón. Había pasado por ahí y sabía que estaba abierto. Sólo tenía una oportunidad. El individuo notó que planeaba algo, (ó no lo se, posiblemente así fue planeado) y chifló fuertemente. El otro sujeto se levantó, corrió precipitadamente y se puso detrás de mí. Ahora estaba entre los dos sujetos.

Muchos escenarios pasaron por mi mente en cuestión de instantes. Si empujaba a uno, si pateaba en los testículos al otro, si corría, si les daba el billete, etc. Entonces, noté algo que me dejó perturbado: El segundo sujeto tenía una mano metida en el bolsillo de su chamarra. No la sacó ni un instante. Había dos posibilidades:

1.- Sólo estaban blofeando. No tenía nada y querían amedrentarme.

2.- El sujeto tenía una pistola, un destornillador, un cuchillo, una varilla, un sacacorchos, un taser, un picahielos, una cuerda de piano, un boxer o cualquier otro objeto que pudiera realizarme una herida.

Pero, esto no era sexi-póker. Era la vida real. No podía arriesgarme y encontrarme con que no mentían. Asumí que iban armados.

- Saca el celular – dijo el segundo sujeto.

Tocando los bolsillos laterales del pantalón encontraron el W600. Lo saqué y lo tomaron.

- Dame el reloj. – Dijo el primer sujeto.

- No, el reloj no. – Dije suplicante.

- Dame el reloj o aquí te quedas.

Sabiendo que no podría contra los dos, en especial si era verdad que al menos uno de ellos venía armado, decidí quitarme el reloj.

- ¿Qué mas trais?

Solo traía mi cartera. ¿O no? ¡No! ¡Traía la voyage 200!

Para el querido y teórico lector que no conoce lo que es una Voyage 200, le diré que es una calculadora, de precio considerable y de capacidades brutales. Indispensable en la carrera de Ingeniería Mecatrónica. Aunque, mi celular era más caro que la calculadora, esta última, al ser indispensable era algo que no podía perder. Ahora sí, tenía que decidir. Si ellos encontraban la Voyage tendría que pelear y era casi seguro que perdería…

“ En mi vida solamente me he peleado dos veces. En la primera gané. En la segunda, aunque fue un empate técnico, creo que yo fui el que salió perdiendo”.

- ¡Hazle báscula! – Le dijo uno al otro vago.

Sabía que si revisaban la mochila todo valdría madre. Tenía que hacer algo. Simplemente hice entonces lo que mi sentido común me dijo que era lo mejor:

- De perdido déjenme las credenciales.

Al decirles esto, sacaba la cartera de la mochila. Los individuos, al ver este acto, parecieron calmarse. (Imagino que ellos pensaron que no quería que revisaran la mochila por que encontrarían la cartera).

Les mostré la cartera y abriéndola al máximo, el primer sujeto sacó el billete de $200.00 y el dólar de la suerte que traía conmigo.

Al menos fueron “amables” y me dejaron la cartera con todo y mis identificaciones y tarjetas.

Se alejaron con rumbo al Tecnológico y me dejaron muy claro que si los seguía no la iba a pasar bien.

Entonces decidí regresar a mi casa. Justo en la esquina de mi casa, encontré un policía en bicicleta. Le comenté lo que había sucedido y rápidamente fue en su busca. Dudo que los haya encontrado. Tal vez los encontró y lo sobornaron. Tal vez los tipos fueron a Don Lolo a festejar su acto. Como sea, yo no lo sabré jamás…

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Así pues, pasó el día anterior.

Después de la frustración, el susto y la pérdida de mi celular de $3600.00 (según mercado libre), todavía tuve que sufrir con los cuestionarios de:

a) Mis padres

- ¿Qué te hicieron? – Pregunta mi madre preocupada

- ¿Qué te quitaron? – Cuestiona mi padre solo un poco más materialista.

- ¿Te pegaron? – Plantea mi madre muy consternada.

Todas las preguntas fueron contestadas, excepto una que hizo mi padre:

- ¿Quién fue?

Me vi tentado a decirle que perdí la tarjeta que los amables asaltantes me dejaron, pero al ver que estaba preocupado me limité a decirle que no sabía.

b) Mis vecinos

Con las mismas preguntas que mis padres, fueron atosigándome uno a uno mis pintorescos vecinos. A ellos también los habían asaltado en otras ocasiones. Por eso era la razón de su preocupación: No querían saber que me pasó, si no saber si fueron los mismos que los asaltaron a ellos.

c) Mis compañeros de clase.

Otra vez, mis compañeros me preguntan lo mismo. Aunque ellos lo hacen más con el morbo de saber que pasó, como estuvo que si me encontraba bien. Además, se notaba la satisfacción que algunos de ellos tenían al saberme vulnerable.

Juguetonamente algunos de ellos me preguntaron:

- ¿Qué te asaltaron mi Teh Dib?

- Sí, así fue Chuy.

- ¿Cómo fue?

- Prácticamente como la mayoría de los asaltos.

- Por eso, pero ¿Cómo?

- Tú sabes. Se me acercaron dos sujetos, me dijeron:

o Buenas noches amables caballero, nosotros somos asaltantes de profesión y decidimos que Ud. Será nuestra víctima hoy; esperamos no incomodarlo mucho.

Irónicamente, hace algunos días, mi profesor de ética me preguntó que haría si me robaran mi reloj. Yo le contesté secamente:

- Usaría otro.

Él entonces comenzó a balbucear acerca del valor sentimental de las cosas. Que si no me importaría, que debería preocuparme más por el valor no material de las cosas, etc.

Ahora le digo:

ESTOY USANDO OTRO RELOJ.

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Las cosas que me quitaron:

a) Mi celular W600i.

b) Mi reloj Casio (qué según mi padre cuesta más de $1000.00 pero yo dijo que no llega a los $600.00)

c) $200.00

d) USD $1.00

Las cosas que no me quitaron pero pudieron haberlo hecho:

a) Mi Voyage 200 (ahora con un programa para circuitos digitales)

b) Mis tennis.

c) Mis anteojos.

d) Mis credenciales (incluyendo la de la beca).

e) Mi mochila.

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Dejando a un lado este acto, te comentaré, querido y teórico lector, que este es mi CUARTO asalto. Uno por nivel académico:

1.- En la primaria: Mi bicicleta.

2.- En la secundaria: $3.00 y el reloj de un compañero.

3.- En el cobach: $20.00 y un reloj.

4.- En el ITSLP: Todo lo mencionado.

P.D. Se que los asaltantes nunca verán este post. No obstante, me gustaría externar mis más oscuros pensamientos hacia ellos.

Dejando a un lado el hecho de que quisiera ser una especie de vengador anónimo que le hace el paro a las personas por el hecho de estar traumado, o sea, como Batman, Daredevil, el tipo de V for Vendetta, etc. También me gustaría arrancarles las bolas y venderlas como adornos para espejos retrovisores.

Nos vemos.

PD. 2.- Ya casi está listo el post de Potabilidad que tanto me han sugerido.